UNA HISTORIA VERDADERA... de cuando la barbería era un lugar en el que disfrutar de un momento de placer y bienestar; la historia de cuando Cella abrió en el corazón de Milán y pronto se convirtió en un punto de referencia de estilo en el mundo del afeitado italiano.
En 1899, los maestros jaboneros y perfumistas se propusieron combinar una amplia experiencia con la pasión por la excelencia y los altos estándares de artesanía, creando una línea de productos de lujo para caballeros y barberos profesionales.
Los jingles y anuncios de radio de Cella se hicieron muy famosos en los años 50 y 60. Así, el embajador vintage e icónico, el sonriente Felice, llegó a innumerables hogares italianos y contó esta historia real con su lema matutino: "Cella Extra Extra Purissima".